miércoles, 2 de enero de 2013

La Sala de las Maravillas: ¿Qué pinta aquí esa piedrecita tan normalita?

The Room of Wonders (La Sala de las Maravillas)
Sergio Ruzzier
Frances Foster Books. Farrar, Straus and Giroux, New York, 2006
No está publicado en español. 
Haz clic arriba para escuchar cómo leemos La Sala de las Maravillas (The Room of Wonders) de Sergio Ruzzier (en inglés)

Pues, no, no cerramos el año 2012 con nuestra selección de los mejores álbumes ilustrados del año, ni comenzamos este 2013 con la próxima maravilla que vaya a aparecer este año. El caso es que este blog de verdad se centra en lo que leemos y disfrutamos, así que no prestamos mucha atención a las fechas de publicación. 

La Sala de las Maravillas (The Room of Wonders) se publicó en 2006. Está descatalogado. Ni siquiera se ha publicado en español. Pero es que La Sala de las Maravillas no es bueno; es magnífico. Y no se merece estar descatalogado, ni tampoco que no se haya traducido a otros idiomas. ¡He dicho! 

Éste no es el primer libro de Sergio Ruzzier que reseñamos aquí, ni tampoco es la primera vez que menciono cuánto nos gustan sus libros en esta casa. Descubrí su libro Amandina mientras miraba más de cerca el catálogo de Neal Porter Books con anterioridad a Un día diferente para el Señor Amos y desde entonces he estado enamorada de sus cuentos, de sus personajes y de sus colores. 

Amandina y La Sala de las Maravillas (The Room of Wonders) tienen en común unos personajes con una una cierta persistencia melancólica que me seduce cada vez que los leo. Los dos abordan en última instancia el placer de hacer lo que uno disfruta haciendo. La Sala de las Maravillas es también una historia sobre comienzos y finales, sobre empezar de nuevo y sobre cómo la casualidad puede asentar mágicamente los cimientos de un propósito satisfactorio y disfrutable en la vida. 

El texto 
Pius Pelosi es una rata cambalachera que colecciona toda clase de artículos curiosos, como 'raíces retorcidas, ramitas interesantes, hojas, plumas y, en ocasiones, alguna piel abandonada por una serpiente', y los expone en los estantes de lo que él llama su Sala de las Maravillas. Visitantes de todas partes llegan a ver su colección y disfrutan escuchando a Pius contándoles todas las historias (algunas reales, otras ficcionales con ánimo de entretener) de cada uno de los objetos. Pero hay un artículo de la colección que les extraña a todos los que llegan: una piedrecita pequeña y gris, absolutamente normal, en un expositor de cristal muy fino en medio de la sala. "Hace daño a la vista. Estropea toda la colección. Deshazte de ella", le dicen.  

A pesar de que Pius le tiene mucho cariño a la piedrecita gris (fue el primer objeto que coleccionó), acaba por creer que deben de tener razón y lo arroja al río. Tan pronto como lo hace, le inunda una sensación de apatía y pesadumbre y no le encuentra ya ningún sentido a nada. Decide que su colección se ha vuelto una carga y regala todos los objetos, hasta quedarse sin nada. Ya con la sala vacía, Pius se tumba en el suelo, sintiéndose "tan vacío como los estantes" y pasa tres días con sus tres noches encerrado y abatido. Al cuarto día sale y ¿qué creéis que se encuentra a la vuelta de la esquina? ¡Una piedrecita gris! Y allá que va de nuevo, en busca de nuevas maravillas para una nueva colección. 

Las ilustraciones
Ruzzier usa tonos cálidos -terrosos y minerales- para crear un decorado teatral de un pueblo toscano sobre papel. Es un experto en hacer que unos personajes feuchos y algo alicaídos resulten irresistiblemente atractivos. Pius tiene unos ojos que te observan desde la página y te atrapan en una hondura emocional que pocos álbumes ilustrados -pocos libros, en definitiva- son capaces de retratar.  

Complementadas por un texto sencillo y contenido, con unas olas poéticas que te salpican con una periodicidad satisfactoriamente esporádica,  las ilustraciones de La Sala de las Maravillas crean un mundo y un estado de ánimo que te invitan a entrar y caminar por las calles con Pius Pelosi y sentir la piedra "suave y fresca" en nuestras manos, junto a él. 

Nos encantan los colores, nos encanta Pius, nos encantan los personajes secundarios, nos encanta el suelo de su Sala de las Maravillas, nos encantan los paisajes y nos encanta, encanta, encanta observar y reírnos de los artículos que hay sobre los estantes. Ah, ¿he mencionado que también nos encantan los maravillos marcos de cada ilustración (cada ilustración con un marco distinto)?   

Echa un vistazo a algunas de las ilustraciones de La Sala de las Maravillas (The Room of Wonders) y disfruta: 
¡Una llave! 

Recogiendo maravillas

Llegando a casa con nuevas maravillas

La Sala de las Maravillas. Haz clic en la imagen y echa un vistazo a los pies de la esquina inferior izquierda. Risas y más risas cada vez que lo leemos.  

Pius tiene una historia para cada artículo de su colección. Yo me muero por escucharlas. 

Pájaro rojo impaciente preguntando a Pius por la piedrecita gris tan normal,
mientras que un cerdo lo mira con desaprobación al fondo

Pius arroja su querida piedrecita gris al río. 

Cambio al blanco y negro para ilustrar el recuerdo de la alegría de encontrar
el primer artículo de la colección.  

Pius sobre el suelo, "tan vacío como los estantes"

Pius encantado con su nueva piedrecita. ¿Quién no lo estaría? 

Pius en busca de nuevas maravillas. 

Lectura en voz alta
The Room of Wonders es uno de esos libros que garantizan un "otra vez, otra vez" al finalizarlo por primera vez. El texto es suave y fluido para leer en voz alta, con muchas imágenes textuales que alimentan la imaginación y la conversación de los niños ("una piel abandonada por una serpiente", "trozos brillantes de vidrio, moldeados y pulidos por el mar", "una carta nunca entregada", "un soldado de plomo que había perdido su fusil"). 

Voy a citar directamente mi reseña de Amandina, porque siento que encaja perfectamente también con The Room of Wonders

[El libro] es una prueba de que aunque la rima, el ritmo y la posibilidad de poner voces tontas ayudan a la hora de leerle a los niños (hablo de niños muy pequeños), si la historia es lo suficientemente potente e intrigante y el personaje está desarrollado con fuerza a través de las ilustraciones, no son ni mucho menos requisitos necesarios para el disfrute de la lectura en voz alta con los más pequeños.  

The Room of Wonders, a la chita callando y con inteligencia, te introduce -seas niño o adulto- en su mundo evocador, en un sentido tanto emocional como intelectual. Es un libro para compartir, para señalar, para preguntar por qué y para maravillarse. También diría que es, de verdad, un libro para todas las edades. 

La Ruzziermanía se ha extendido de nuestra familia inmediata a la familia extendida y me gustaría compartir con vosotros un vídeo de mi hermana leyéndole The Room of Wonders a mi encantadora sobrina de dos años. Creo que es un ejemplo perfecto de cómo compartir libros con niños más pequeños: a relajarse y a disfrutar (¡tú también!).  

Otras cosas que nos gustan de The Room of Wonders
No lo sé con certeza pero estoy dispuesta a apostar que La Sala de las Maravillas es uno de esos libros que permanecen con uno durante la infancia y hasta la vida adulta. Habrá que preguntarle a mi hijo dentro de 20 años. 

Lo que sí sé, sin embargo, es que hay un determinado tipo de libro que no es disfrutable tan solo en un plano ficcional, sino que se desborda e inunda la vida real. Hace un par de semanas fui a dar un paseo con mi hijo a un parque cerca de casa y nos adentramos en una zona a la que nunca habíamos ido antes. Estaba muy emocionado porque estábamos entrando "en lo profundo del parque" y de repente dijo, sin sugerencia alguna por mi parte: "¿Jugamos a ser ratas cambalacheras? ¡Vamos a encontrar cosas para coleccionar!" Así que decidimos recoger muestras de cada planta o árbol que viéramos hasta tenerlos todos. ¿Quién es Pius?", le pregunté. ¡Pues yo, claro!, dijo contentísimo. 

¡Pius es el mejor! 

¡Pues ya lo veis! A la espera o con la esperanza de que alguien decida editarlo en español (yo cada vez que me encuentro a alguien lo procuro mencionar por si fuera alguien importante, con poder en estos asuntos) os tendréis que conformar con la grabación del cuento que aparece arriba (en inglés), y con mirar las maravillosas ilustraciones, también arriba.  

Podéis leer una entrevista excelente y muy reciente a Sergio Ruzzier, aquí. Podéis leer una entrevista algo más antigua, pero igualmente fantástica, aquí

(c) de todas las ilustraciones de este post, Sergio Ruzzier, 2006.  
(c) del texto, Ellen Duthie. Cópialo o reprodúcelo pero sé buena gente y cita tu fuente (autora y blog).  

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